domingo, 20 de febrero de 2022

JUSTICIEROS: FRUTO AMARGO

Justicieros. Director: Anders Thomas Jensen. Protagonistas: Mads Mikkelsen, Nikolaj Lie Kaas, Andrea Heick Gadeberg, Lars Brygmann, Nicolas Bro, Gustav Lindh, Roland Møller, Albert Rudbeck Lindhardt, Anne Birgitte Lind, Omar Shargawi, Jakob Ulrik Lohmann, Henrik Noël Olesen y Gustav Dyekjær Giese, entre otros. Guionista: Anders Thomas Jensen, sobre una idea original de Nikolaj Arcel y Anders Thomas Jensen. Zentropa Productions / Film I Väst / Zentropa International Sweden. Dinamarca, 2020. Estreno en la Argentina: 17 de febrero de 2022.


Hay algo que no está bien. La película arranca con esa sensación y termina con esa sensación, aunque el estímulo externo que imprima esa emoción cambie de manera brutal y determinante, tanto para los personajes como para los espectadores. Justicieros (Retfærdighedens ryttere) cruza ese límite con mucho humor negro, una incorrección política aun mayor, explosiones de violencia seca y áspera; y un afecto crudo y descarnado hacia las criaturas que pueblan el film, respeto hondo y profundo que Anders Thomas Jensen sabe detener un segundo antes de que todo caiga en la crueldad desangelada.


Sabemos que hubo un incidente en un tren. Grave, muy grave. Con un saldo devastador para la familia de Markus (notable Mads Mikkelsen), soldado que Afganistán ha terminado de convertir en un ser frío, distante, emocionalmente quebrado. Un hombre que debe dejar su cotidianeidad (matar o morir en el frente de batalla) para retomar esa alienación inmanejable que es la vida en familia, el cuidado de su hija, la interrelación con su lejano entorno cercano; y la tramitación de un duelo que se resiste a abordar.


Hasta que un par de extraños tocan a su puerta, con una noticia reveladora y traumática. El incidente en el tren no fue un accidente. Fue un atentado, planeado y ejecutado por un grupo entre mafioso y extremista. Otto y Lennart (impagables Nikolaj Lie Kaas y Lars Brigmann) lo saben porque han sobrevivido. El primero, al tren. Los dos, a sus propias historias. Y han llegado a esa conclusión después de hacer bien su trabajo, que consiste en la lectura de estadísticas matemáticas para llegar a la verdad. Y la verdad que encontraron en ese cruce de posibilidades y probabilidades, es absoluta. Atentado.


A partir de ahí, comenzará a gestarse el vínculo entre Markus, Otto, Lennart y otros dos seres atrozmente castigados por la vida: Emmenthaler y Bodashka (enormes Nicolas Bro y Gustav Lindh). Sin tiempo para prepararse; y sin más preparación que sus ganas, esta emparchada Armada Brancaleone a la danesa deberá abandonar su inconfortable zona de confort para salir en busca de Justicia y Venganza. Justicia para los muertos que no deberían haber muerto. Venganza contra la vida que los cacheteó de manera perversa.


Sin la calidad interpretativa con que los actores componen este ejército de seres rotos, tanto física como psíquicamente, Justicieros sería otro de los huecos tiroteos que el séptimo arte regurgita regularmente, con oficio e idoneidad técnica. Pero en las manos de este talentoso combo comandado por Thomas Jensen, el film se eleva como un agridulce canto de esperanza. Un hipnótico thriller navideño, transgresor y sangriento, donde la esperanza crece de la mano del sufrimiento y el dolor, fruto amargo que nace entre la certeza que dan las estadísticas y la naturaleza aleatoria de los acontecimientos.
Fernando Ariel García

1 comentario:

  1. Humor negro, incorrección política y estallidos de la violencia. Una gran fórmula cinematográfica.
    Y es para estar de acuerdo con los personajes que buscan venganza, justicia vengativa. Y una vez iniciado, ya no pueden detenerse, como lo incida el trailer.

    En el fiche, todos los personajes, excepto uno, tienen expresión de muy enojados. Lo que tiene sentido.

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