martes, 24 de noviembre de 2009

EL MANIFIESTO DE RIUS

Manifiesto a la nación mexicana, incluidos extraños que la habitan

Visto que desde 1934 decidieron mis padres que naciera, y que desde 1954 he venido como quien dice trabajando en cosas como caricaturas, chistecitos, cartones editoriales, historietas, trabajos de divulgación de todo tipo, carteles, pinturas, grabados, acuarelas, portadas, afiches, folletos, volantes y demás cosas relacionadas con el humor gráfico, hasta alcanzar la cifra de

Cincuenta mil dibujos
50.000 dibujos
o sea 50 mil dibujos
Llegó el momento en que me siento, NO cansado, pero sí aburrido. Sobre todo estoy hasta la madre, si me permiten decirlo, de ocuparme de los políticos y otra clase de rateros y corruptos, por lo que he decidido retirarme un poco del oficio.
No quiere decir que vaya a jubilarme, porque a los que trabajamos por nuestra cuenta y riesgo no hay quien nos jubile, ni Hacienda permite que lo hagamos. Y como hay muchos que están jode y jode con que por qué ya no hago casi nada para El Chamuco, es mi deseo y voluntad manifestar que:
Voy a seguir colaborando en este infame panfleto cuando me den ganas de hacerlo y se me ocurra algo. De no ser así, que me perdonen los lectores y fans, pero estoy francamente hasta la Mother de trabajar como negro para vivir como blanco, así como de tener que ocuparme de los políticos que llevan siglos de estarnos robando y riéndose de nosotros.
Ansina mismo manifiesto que:
Ya no formo parte de la Dirección de esta revista, por lo que no me hago responsable ni de las maravillas que se publican, ni de las pésimas cosas que hacen mis colegas. Allá ellos y con su PAN-PRI se lo coman. Yo nomás me asumo responsable de las pendejeces que hago lo menos seguido posible y con la mayor calecatencia idem.
Pese a lo cual, declaro solemnemente mi solidaridad, amistad y hasta admiración por mis colegas y cuales que se fletan para hacer la revista, y que si un día nuestras muy eficaces y pinches autoridades los quieren joder, estoy en la mejor disposición de hasta llevarles cigarros aunque no fumen y viceversa pa’ que se entienda.
Eduardo Del Río (rius)

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