miércoles, 27 de abril de 2022

DEATH OF THE JUSTICE LEAGUE: HAY QUE DEJAR DE ROBAR CON LA MUERTE

Justice League Nº 75. Guionista: Joshua Williamson. Dibujante: Rafa Sandoval. Entintador: Jordi Taragona. Colorista: Matt Herms. Portadistas: Daniel Sampere y Alejandro Sánchez (regular); Alex Maleev; Dan Jurgens, Norm Rapmund y Alex Sinclair; Mikel Janín; Simone Di Meo; Tony Harris; Todd Nauck y Matt Herms (alternativas). Editor: Paul Kaminski. DC Comics. EE.UU., junio de 2022.


Hace rato que me vengo preguntando por qué, cada vez, me atraen menos los cómics regulares de DC y Marvel, en general. Sus personajes me siguen gustando, algunos de los autores involucrados me interesan sobremanera. Sin embargo, cuando intento volver a engancharme con alguna de las series clásicas, me siento violentamente expulsado. Entiendo que las historietas ya no se hacen ni se leen como cuando yo era pibe; y me parece bien que sea así. Pero me niego a aceptar que se hayan encerrado tanto sobre sí mismas, que elijan hablarle sólo (o casi) a sus feligreses mensuales. Y, sobre todo, me revienta que hayan renunciado a la sorpresa, quedándose sólo en la ratificación de lo esperado.


Es lo que me pasó con este último número del actual volumen de Justice League. El número de la muerte de la Liga de la Justicia, un evento que se viene anunciando, con bombos y platillos, desde hace meses. Que Superman, Batman y la Mujer Maravilla caigan asesinados a mitad del número, no tiene nada de malo. Que un par de viñetas después los acompañen Linterna Verde (John Stewart), la Mujer Halcón, Aquaman, Zatanna y el Detective Marciano, tampoco. Que toda la secuencia sea dramáticamente intrascendente (para mí como lector), es algo pésimo. Y que la muerte de la Liga de la Justicia sea lo único que tenga para ofrecer La muerte de la Liga de la Justicia, me parece tan pobre como patético.


Sí, ya sé. En la modernidad todo parece ser la instancia preparatoria del gran evento que está por llegar, como si la próxima saga (Dark Crisis) fuera el definitorio Godot que Vladimir y Estragon siguen esperando (en vano) al costado del camino. Se ve venir la conformación de una nueva Liga de la Justicia (aunque no tenga ese nombre), organizada bajo la versión más moderna, inclusiva y políticamente correcta de la clásica tríada superheroica de DC: El Superman homosexual y con conciencia ecológica, el Batman afroamericano; y la Mujer Maravilla latina y descendiente de indígenas. Nada nuevo bajo el sol.


Pensada para celebrar los 30 años de la clásica Muerte de Superman, que instaló el yeite argumental de matar al personaje principal para hacerlo revivir un tiempo después, La muerte de la Liga de la Justicia juega con el influjo gráfico de Crisis en Tierras Infinitas para cargarse a las figuras titulares. Hasta que, dentro de un año (más o menos), todos los muertitos vuelvan a caminar entre los vivos y todo arranque de nuevo. Ya lo dijo el malvado New Neighborhood: Hay que dejar de robar, con la muerte, por dos años.
Fernando Ariel García

sábado, 23 de abril de 2022

KISS: ROCK AND ROLL, TODA LA NOCHE

Kiss: The End. Guionista: Amy Chu, con la colaboración de William Messner-Loebs. Dibujos: Edu Menna. Color: Jorge Sutil. Portadistas: Stuart Sayger, Jorge Fornés, Denis Medri, Ruairí Coleman y Timothy C. Brown, Pasquale Qualand, Rodney Buchemi y Wesllei Mandel, Reilly Brown y Jim Charalampidis, Brent Schoonover y Alberto Silva. Editor: Kevin Ketner. Dynamite. EE.UU., abril a septiembre de 2019.


Llegó el gran día. A la Argentina, me refiero. Hoy, a las 21 horas, en el Campo Argentino de Polo, Kiss subirá a un escenario local por última vez. Única presentación dentro de la larga gira de despedida End of the Road, iniciada en Canadá el 31 de enero de 2019, suspendida y retomada durante la pandemia; y con cierre pautado para octubre en los EE.UU., la presentación de la megabanda sellará (a lo grande) la historia y el mito fundado por Gene Simmons, Paul Stanley, Peter Criss y Ace Frehley.

Primera presentación en vivo de Kiss. Nueva York, 30 de enero de 1973.

Como un elemento más de la andanada mercadotécnica montada alrededor de la gira, la editorial norteamericana Dynamite publicó, entre abril y septiembre de 2019, el cómic Kiss: The End, miniserie de cinco entregas que, básicamente, lo único que buscaba era celebrar el legado fantástico del grupo. El guion de Amy Chu (ayudada a partir del tercer número por el veterano William Messner-Loebs) es sencillo; y logra amalgamar el espíritu superheroico de los músicos, con una historia que fusiona la imaginería demoníaca asociada al heavy metal, la sofisticación filosófica del rock progresivo; y el sentimentalismo edulcorado de la balada romántica. Tres géneros que, en distintos tiempos y en diferentes formas, Kiss supo cultivar.

Kiss en el Maracaná, durante el cierre de Creatures of the Night Tour
Rio de Janeiro, 18 de junio de 1983.

Hay un fanático de la banda al que todo le sale mal, una chica rubia maldecida con el toque de la muerte, un ángel y un demonio, una espada mágica y un puñado de canciones. Y los cuatro miembros de Kiss, obviamente, que en determinado momento recibirán la ayuda del Rey del Delta Blues, Robert Johnson, también conocido como el Abuelo del Rock and Roll.

Última fecha del Psycho Circus Tour. Ciudad de México, 24 de abril de 1999.

Por cuestiones místicas, los personajes (y los lectores) podremos participar de cuatro icónicos mojones en la trayectoria de la banda. Nueva York, 30 de enero de 1973, primer recital en vivo de la banda, en un sucucho del Hotel Diplomat conocido como Rock and Roll Ball. Rio de Janeiro, 18 de junio de 1983, ante un Maracaná desbordado, durante el cierre de la gira Creatures of the Night Tour, festejo oficial de sus diez años de existencia. Ciudad de México, 24 de abril de 1999, en el Foro Sol explotado de gente, en el último concierto del Psycho Circus Tour, con efectos 3-D arriba del escenario. Tokio, 11 de diciembre de 2019, en el Tokyo Dome, segunda escala japonesa del End of the Road Tour.

Kiss, con un demonio como invitado, durante el End of the Road Tour. Tokio, 11 de diciembre de 2019.

No hay que buscar mucho más en Kiss: The End. Porque no lo tiene. Y porque, me parece, tampoco lo pretendía. Se trata de una válida excusa para rememorar el vértigo emocional que la banda despierta en el púbico que tuvo la suerte de experimentarlo en vivo. La alquimia especial, única e intransferible que la Argentina vivirá hoy, otra vez, pero por última vez. Rock and Roll, toda la noche.
Fernando Ariel García

miércoles, 20 de abril de 2022

VIRUS:32: APOCALIPSIS ZOMBI EN MONTEVIDEO

Virus:32. Director: Gustavo Hernández. Protagonistas: Paula Silva, Daniel Hendler, Pilar García y Franco Rilla, entre otros. Guionistas: Gustavo Hernández Ibáñez y Juma Fodde Roma. Aeroplano / Mother Superior. Uruguay / Argentina, 2022. Estreno en la Argentina: 21 de abril de 2022.


Lo más importante, al principio. Virus:32 es una excelente película de zombis. Mucho mejor que el promedio de cintas internacionales; y tan buena como los logrados ejemplos que nos llegan de distintas partes del mundo (ahora mismo estoy pensando en la coreana Tren a Busan, que nosotros conocimos como Invasión Zombi). Con muchísimo talento y (supongo) un presupuesto algo ajustado, Gustavo Hernández logró traducir la lógica narrativa del canon a verosímiles locales, para hacerla funcionar como un relojito en la geografía montevideana.


Es cierto, el argumento es más bien una excusa; y hay algunas cuestiones que se descubren y/o resuelven de manera demasiado rápida. Pero ni incomoda ni molesta, porque la trama es, sobre todas las cosas, una frenética historia de supervivencia. Sumamente visceral, revulsivamente violenta, incómoda y oscura. De esas que te tienen pegado al asiento y moviendo el culo sin parar, porque te pone nervioso, atento, ansioso, hiperventilado, desesperado por encontrar ese hueco que te permita seguir respirando un ratito más.


Y aquí es donde aparece el gran protagonista del film. El máximo mérito de la producción, el sostén férreo y decidido de Virus:32. La locación. Los interiores del club social Neptuno, una institución centenaria ubicada en el puerto de Montevideo que, hasta donde pude averiguar, está cerrada y prácticamente abandonada desde 2019. No sé qué apareció primero, si la idea o el lugar, pero sin los espacios cadavéricos de ese club, reconvertidos en refugios precarios y/o trampas mortales, nada de lo que logró Gustavo Hernández podría haberse logrado. Y pucha que alcanzó logros, eh?


Uno es la (me parece) aproximación sociológica al fenómeno zombi. No hay bajadas académicas ni discursos cientificistas, pero que los muertos vivos estén más (pre)ocupados en descargar toda su virulenta agresividad reprimida que en comerse los cerebros de sus víctimas, algo debe querer decir. Y segundo, la superación cualitativa del género terrorífico. Los zombis meten miedo, obvio, pero hay dos escenas puntuales, una con Daniel Hendler y otra con Paula Silva, donde Hernández corporiza el inaprensible horror existencial que Kurtz sólo enunció. Con una crueldad descarnada y quirúrgica, rompe a los personajes (y al espectador) de la manera más abismal y absoluta que pueda concebirse. El detalle que transforma a una excelente película de zombis en una excelente película. Y punto. 
Fernando Ariel García

viernes, 15 de abril de 2022

LAS ROJAS: SORORIDAD FEMENINA EN UN WESTERN CON PREMISA FANTÁSTICA

Las Rojas. Director: Matías Lucchesi. Protagonistas: Mercedes Morán, Natalia Oreiro, Diego Velázquez y Alberto Leiva, entre otros. Guionistas: Mariano Llinás y Matías Lucchesi. Rizoma / Patagonik / Cimarrón / Productora MG / Oeste Films. Argentina / Uruguay, 2020. Estreno en la Argentina: 14 de abril de 2022.


Cuerpo de caballo; cabeza, miembros y alas de águila. Así podríamos describir, rápidamente, al hipogrifo. Mítica criatura imaginaria, especie de Pegaso de la Edad Media que dijo presente en cientos de obras literarias, pictóricas y cinematográficas, de Orlando furioso a Harry Potter, pasando por Borges e Ingres. Por su naturaleza híbrida, fusión de animal doméstico y salvaje, terrestre y aéreo, la simbología ha decidido abordarlo como ejemplo de las hazañas renacentistas del hombre, tanto como alegoría de sus impulsos más egoístas.


Entre estos dos extremos pendula el tratamiento del mito que hace Las Rojas, amparado en el secreto que custodia con devoción la paleontóloga Carlota, interpretada por Mercedes Morán. Mujer hosca y dura, que asegura haber descubierto los únicos restos fósiles encontrados de un hipogrifo, que también podrían ser los huesos de cualquier otro animal. Diez años después de la revelación que le granjeara fama y reconocimiento mundiales, la fundación que financia su proyecto personal decide enviarle una auditoría científica y contable, para evaluar el estado real de las cosas y ver cómo seguir adelante, si es que van a seguir adelante. Y ahí entra en escena Constanza (Natalia Oreiro), otra paleontóloga recia y decidida, que ha hecho carrera en el costado administrativo del trabajo.


Con una premisa tan atractiva, es una pena que Las Rojas no logre definir una identidad argumental, licuando gran parte de su capital propositivo. Después de una secuencia inicial larga y algo bizarra, totalmente hablada en italiano y sin subtítulos, la película se planta en el encontronazo de estos dos caracteres parecidos y antagónicos, que (se sabe de entrada) terminarán cambiando el encono por la sororidad. Entonces, descartado el tono fantástico-aventurero de Indiana Jones o Jurassic Park, uno espera que la película empiece a circular por los carriles del policial científico o del thriller administrativo, pero no. La cosa se estanca en el duelo personal entre las mujeres, proponiendo incluso algunos paralelismos en las historias personales de cada una, que finalmente no llegan a desarrollarse. Sobre todo, porque la irrupción del vil Freddy (Diego Velázquez) termina de volcar la trama hacia el imaginario narrativo que la soberbia fotografía plasmada por Ramiro Civita ha venido trabajando desde que terminara el innecesario prólogo italiano: El western.


Rodada en escenarios naturales de Uspallata y Potrerillos, en la provincia de Mendoza, cada toma de esos imponentes escenarios naturales cuentan, por sí solos y con una potencia  poética avasallante, los dramas existenciales que los personajes buscan poner en palabras; la geografía emocional de esas criaturas movidas por el conocimiento, la búsqueda de la verdad y la ambición desmedida; el estado de duermevela que Las Rojas necesita para transitar su verosímil sin caer en el pastiche ridículo. Logrando hospedar, de manera natural y orgánica, esa pata sobrenatural que nunca deja de sobrevolar el film. Lástima que el resto no haya podido estar a la altura.
Fernando Ariel García

jueves, 14 de abril de 2022

LOS SECRETOS DE DUMBLEDORE: SE PUEDE HACER MÁS LENTO

Animales fantásticos – Los secretos de Dumbledore. Director: David Yates. Protagonistas: Eddie Redmayne (Newt Scamander), Jude Law (Albus Dumbledore), Mads Mikkelsen (Gellert Grindelwald), Ezra Miller (Credence Barebone / Aurelius Dumbledore), Dan Fogler (Jacob Kowalski), Alison Sudol (Queenie Goldstein), Callum Turner (Theseus Scamander), Jessica Williams (Lally Hicks), William Nadylam (Yusuf Kama), Victoria Yeates (Bunty Broadacre), Poppy Corby-Tuech (Vinda Rosier), Richard Coyle (Aberforth Dumbledore), Aleksandr Kuznetsov (Helmut), Oliver Masucci, Maria Fernanda Cândido y Dave Wong, entre otros. Participación especial de Katherine Waterston (Tina Goldstein), Fiona Glascott (Minerva McGonagall) y Hebe Beardsall (Ariana Dumbledore). Guionistas: J.K. Rowling y Steve Kloves, basado en personajes y situaciones creados por J.K. Rowling. Warner Bros. Pictures / Heyday Films. EE.UU., 2022. Estreno en la Argentina: 14 de abril de 2022.


Digámoslo de entrada. Los secretos que promete Animales fantásticos: Los secretos de Dumbledore (Fantastic Beasts: The Secrets of Dumbledore) no son tan secretos. Tampoco son tantos ni tan importantes como para sostener el interés de una película que, se supone, debería hacer avanzar la acción de manera decidida, atrapante y entretenida. De hecho, con un poco de perspicacia y la lectura de un par de melodramas aventureros clásicos, se adivina todo lo que está por aparecer en pantalla.


La saga parece trabajar exclusivamente para los fanáticos de Harry Potter; y por eso apunta sus cañones al corazón de los seguidores incondicionales. Para ellos, el primer visionado de la película estará lleno de golpes emotivos tan bajos como certeros. Reminiscencias varias, referencias de distinto gramaje y color. Declamaciones que abundan sobre lo ya conocido y explicado, vuelto a presentar como si fuera nuevo tan sólo por haber cambiado el color del envoltorio.


Decidida a ser precuela de Harry Potter, la saga parece haber renunciado a todas las posibilidades de ampliar sus horizontes más allá del escenario geopolítico que plantea la escalada que desembocará en la Guerra Global de Magos. Después de Animales fantásticos ydónde encontrarlos y Los crímenes de Grindelwald, este tercer escalón se detiene específicamente en la relación personal que une (y enfrenta) a Dumbledore (Jude Law) con Grindelwald (ahora con el rostro y la presencia escénica de Mads Mikkelsen, reemplazo del renunciado Johnny Depp), en un marco que equipara la cruzada segregacionista del hechicero oscuro con el afianzamiento del nazismo en la Alemania de 1930.


Con Newt Scamander y sus animales fantásticos corridos del eje central, Los secretos de Dumbledore comete dos pecados insalvables. El primero, insistir en seguir contando algo que ya se sabe cómo y cuándo terminará, sin animarse a mezclar las cartas para sumarle algún grado de tensión e incertidumbre a la partida que se está jugando. Y segundo, mostrarlo todo de la manera más anodina posible. Como si quisiera refutar al genio ilusionista de René Lavand (uno que la sabía lunga a la hora de encantar a la platea con sus actos de magia) y confirmar que sí, al final, todo se puede hacer más lento.
Fernando Ariel García

martes, 12 de abril de 2022

LOS CRÍMENES DE GRINDELWALD: HARRY POTTER MATA ANIMAL FANTÁSTICO

Animales fantásticos: Los crímenes de Grindelwald. Director: David Yates. Protagonistas: Eddie Redmayne (Newt Scamander), Katherine Waterston (Tina Goldstein), Dan Fogler (Jacob Kowalski), Alison Sudol (Queenie Goldstein), Ezra Miller (Credence Barebone), Zoë Kravitz (Leta Lestrange), Callum Turner (Theseus Scamander), Claudia Kim (Nagini), William Nadylam (Yusuf Kama), Kevin Guthrie (Abernathy), Jude Law (Albus Dumbledore), Johnny Depp (Gellert Grindelwald), Carmen Ejogo (Seraphina Picquery), Poppy Corby-Tuech (Vinda Rosier), Victoria Yeates (Bunty) y Jessica Williams (Lally Hicks), entre otros. Participación especial de Fiona Glascott (Minerva McGonagall). Guionista: J.K. Rowling. Warner Bros. Pictures Pictures / Heyday Films. EE.UU., 2018. Estreno en la Argentina: 14 de noviembre de 2018.


Los últimos serán los primeros. Era obvio que la explotación zoológica de Animales fantásticos y dónde encontrarlos no tenía la espalda argumental para bancar cinco películas, por más carismáticos que resulten los bichos acumulados en una valija. Así que se hizo lo que había que hacer para garantizar la supervivencia de una franquicia que, a priori, parecería inmortal. Animales fantásticos: Los crímenes de Grindelwald (Fantastic Beasts: The Crimes of Grindelwald), será la segunda entrega de la serie, pero funciona mejor como punto de partida de esta larga travesía.


Dejando de lado la comedia (sin olvidarse de lo necesaria que es para distender y/o preparar climas más densos), todo en esta película de David Yates y J.K. Rowling se vuelve más oscuro y ominoso, con pretensiones de trascendencia dramática y mucha pose de seriedad, que busca disimular la chatura argumental y la ausencia de originales vueltas de tuerca. La rendición incondicional aparece firmada con su sujeción (tan inevitable como innecesaria) a la saga madre, la que dio origen al Mundo Mágico y la que sigue siendo motor y ancla de sus ficciones derivadas. Si Harry Potter es el Batman de este universo mágico, a Animales fantásticos se le acaba de cercenar la posibilidad de llegar a ser el Superman que vuele a su lado, sólo se le permitirá volverse el Robin que crezca a la sombra del Hombre Murciélago.


Por esa razón, el nudo argumental se planta en hechos pasados, ya declamados en la saga literaria y cinematográfica de Harry. La campaña supremacista de Grindelwald y su deseo de imponer un nuevo orden mundial donde él sea rey, los hechiceros fundamentalistas hagan cumplir sus deseos; y los humanos ejecuten sus órdenes. Un menú xenófobo y dictatorial que necesitará ser detenido a tiempo. Y aquí entra en escena Albus Dumbledore, futuro mentor de Harry Potter, para ordenar el ejército de magos buenos que deberá presentar batalla; y obturar definitivamente cualquier intento independentista que pueda soñar el magizoólogo Newt Scamander, que seguirá detentando el título protagónico, pero ha perdido el poder de decisión.


Per se, este giro de ciento ochenta grados no es ni bueno ni malo. Y todo dependerá de las elecciones creativas que se tomen sobre este nuevo tablero de operaciones. A mí, personalmente, las movidas que se jugaron en esta instancia de la partida, me parecieron bastante obvias y previsibles, carentes de riesgo y netamente preparatorias para el avance de Dumbledore sobre el interior de la narración, enfocado ahora hacia el horizonte de la Guerra Global de Magos y el encontronazo definitorio entre Dumbledore y Grindelwald. Lo cual plantea un problema argumental de peso, porque Harry Potter ya se encargó de contar cuándo y cómo termina dicha escaramuza. Habrá que ver qué conejo sacan de la galera para que el aburrimiento no mate a los animalitos de la valija.
Fernando Ariel García 

lunes, 11 de abril de 2022

ANIMALES FANTÁSTICOS Y DÓNDE ENCONTRARLOS: UN MAGO AL QUE SE LE VE EL TRUCO

Animales fantásticos y dónde encontrarlos. Director: David Yates. Protagonistas: Eddie Redmayne (Newt Scamander), Katherine Waterston (Tina Goldstein), Dan Fogler (Jacob Kowalski), Alison Sudol (Queenie Goldstein), Samantha Morton, Ezra Miller (Credence Barebone), Jon Voight, Carmen Ejogo (Seraphina Picquery), Collin Farrell (Percival Graves), Ron Perlman (voz de Gnarlak) y Faith Wood-Blagrove. Participación especial de Johnny Depp (Gellert Grindelwald) y Zoë Kravitz (Leta Lestrange). Guionista: J.K. Rowling. Warner Bros. Pictures / Heyday Films. EE.UU., 2016. Estreno en la Argentina: 17 de noviembre de 2016.


Aclaro antes de que oscurezca. No soy fanático de Harry Potter. No leí los libros ni vi las películas. Pero vivo en este mundo y soy padre de una hija adolescente, así que sí sé de qué va toda la saga del mago que (para mí) siempre será un clon bastardo de Timothy Hunter. Y no hace falta saber nada de todo esto para entender que Animales fantásticos y dónde encontrarlos (Fantastic Beasts and Where to Find Them) es la primera entrega de una saga ambientada en el pasado del Mundo Mágico creado por J.K. Rowling, pensada como desprendimiento y precuela de las aventuras de Harry Potter.


La semilla, por su impronta metaliteraria, me parece buenísima. En el primer libro de Harry Potter se deja establecido que Animales fantásticos y dónde encontrarlos es uno de los principales manuales de estudio que los alumnos usan en el colegio Hogwarts. Se trata de una guía de las criaturas fantásticas que habitan el mundo, escrita por el magizoólogo Newt Scamander muchos años antes, en base a su trabajo de campo a lo largo y ancho de la Tierra. Que es lo que viene a contar esta película, ambientada en la Nueva York de 1926.


En este sentido, la película cumple de manera abultada. Los personajes resultan lo suficientemente entrañables como para que uno se interese por el devenir de sus vidas. Todo se cuenta con gracia y sentido del asombro, aun cuando las cosas se ponen crueles, injustas y violentas con el chico abusado y reprimido al que le toca jugar, en mayor medida, el papel de malo. Y lo más importante de todo, los animales fantásticos que pueblan la pantalla son visiblemente animales, realmente fantásticos y sumamente carismáticos. Que a ellos les toque protagonizar las escenas cómicas del film suma mucho, porque el mayor atractivo de la propuesta descansa, justamente, debajo de esas patas.


Como precuela del universo de los Mundos Mágicos, en cambio, Animales… es bastante tramposa. Demasiado, diría yo. Cae de maduro, por la desconexión existente entre la escena inicial y la trama central de la película, que la Guerra Global de Magos referida en la saga de Harry Potter, será el evento central que abordará la serie a partir del próximo episodio. Y que más temprano que tarde, los personajes centrales terminarán siendo las versiones jóvenes de Albus Dumbledore y Gelbert Grindelwald; el primero ausente sin aviso y el segundo jugando a las escondidas durante todo el metraje. Una lástima, porque termina rebajándole el precio a los buenos contenidos que se estuvieron mostrando. Como si el mago, en un momento de descuido, hubiera dejado ver cómo hacía el truco.
Fernando Ariel García

sábado, 2 de abril de 2022

LA BATALLA DE LAS MALVINAS: CLAMA EL VIENTO Y RUGE EL MAR

La batalla de las Malvinas (Fierro 1 a 7). Guion: Ricardo Barreiro. Dibujos: Alberto Macagno, Marcelo Pérez, Carlos Pedrazzini, Julio César Medrano. Portada: Oscar Chichoni (Fierro Nº 2, octubre de 1984). Director: Juan Sasturain. Ediciones de la Urraca. Argentina, septiembre de 1984 a marzo de 1985.


Ni la primera, ni la mejor. Sin embargo, la obra de Barreiro, Macagno, Pérez, Pedrazzini y Medrano fue; y sigue siendo, la que instaló definitivamente el tema Malvinas como abordaje recurrente para el noveno arte argentino. Para mí, uno de los miles de jóvenes que compraron la Fierro en tiempo real y devoraron sus páginas con la tinta todavía fresca, La batalla de las Malvinas sintetizó el espíritu de una revista de historietas que comulgó (como ninguna otra, tal vez) con el clima de época que le tocó habitar, definir y explicitar.


Leída hoy en día, se comprende por qué La batalla… quedó inconclusa. Crónica bélica, denuncia periodística, relato aventurero, relectura política del pasado todavía presente, recupero de la tradición historietística oesterheldiana (Ernie Pike incluido). Un relato urgido, apurado y caliente, que no supo cómo homologar todas las lógicas narrativas que amontonó y mezcló en crudo. Sin medir las cantidades y sin conocer el tiempo de cocción, la fusión terminó siendo una mezcolanza. La falta de perspectiva histórica (supongo) le impidió elegir una mirada desde dónde elaborar una narración y, en simultáneo, elaborarse como narración.


Más allá de todo, si algo desborda de estas páginas, son dos valores inquebrantables. El coraje de contar las cosas de una manera que no se habían contado, en un momento en que los militares genocidas todavía tenían poder y todavía tenían las armas en su poder. La pasión por hacer Justicia con una figura que estaba siendo injustamente invisibilizada: la del colimba que fue a pelear a las islas o esperaba apostado en el continente, la del soldado que quedó sobre la escarcha o bajo las heladas aguas del sur, la del veterano que volvió para empezar otra guerra.


Hace muchos años, hablando con Ricardo Barreiro, le pregunté si no le gustaría terminar la historieta de Malvinas. Para mi sorpresa, me dijo que no. Que estaba bien así, que no podía terminar porque Malvinas no había terminado. Creí que me estaba mintiendo. Hoy siento que tenía razón.
Fernando Ariel García
a 40 años de la Guerra de Malvinas 

viernes, 1 de abril de 2022

RED: ES UN PANDA GRANDE Y PISA FUERTE

Red. Directora: Domee Shi. Voces (inglés): Rosalie Chiang, Sandra Oh, Ava Morse, Maitreyi Ramakrishnan, Hyein Park, Orion Lee, Wai Ching Ho, Tristan Allerick Chen, Lori Tan Chinn, Mia Tagano, Sherry Cola y Lillian Lim, entre otros. Voces (castellano latino): Estefanía Piedra, Itatí Cantoral, Regina Tiscareño, Alicia Vélez, Zoé Ivanna Mora, Mauricio Pérez Castillo, Magda Giner, Oliver Díaz Barba, Olga Hnidey, Liliana Barba Meinecke, María Eugenia Guzmán y Yolanda Vidal, entre otros. Guionistas: Domee Shi, Julia Cho, Sarah Streicher. Canciones: U Know What's Up, 1 True Love y Nobody Like U, compuestas por Billie Eilish y Finneas O'Connell, e interpretadas por la banda ficticia 4*Town (voces en inglés de Jordan Fisher, Finneas O’Connell, Topher Ngo, Grayson Villanueva y Josh Levi; voces en castellano latino de Miguel Ángel Ruiz, Eduardo Gutiérrez, Sergio Maya, José Luis Piedra y Álvaro Salarich). Walt Disney Pictures / Pixar Animation Studios. EE.UU., 2022. Estreno en la Argentina: Disponible en Disney+ desde el 11 de marzo de 2022.


Tres al hilo. Primero, Soul. Después, Luca. Y ahora, Red (Turning Red). Tres pelis de Pixar, pensadas para el cine, que desembarcan directamente en la plataforma Disney+. Esperemos que tenga que ver con cuestiones logísticas derivadas de la pandemia y no con algún tipo de bombeo interno. Porque si bien ninguna de las tres estuvo a la altura de lo que uno (lo digo por mí) espera de una obra de Pixar, lo cierto es que todas tienen más de un par de aciertos que merecen la pantalla grande.


La que nos ocupa hoy es una clásica metáfora del paso de la niñez a la pubertad. Una instancia traumática para todos y todas, pero que en las niñas tiene un plus muy especial, que viene dado por la primera menstruación. Lo sé por experiencia paterna. Se trata de un mojón existencial que desata una revolución hormonal incontrolable; y que hace del inmanejable manojo de emociones una de las montañas rusas más veloces y ásperas del parque de diversiones que viene a ser la vida cotidiana.


La niña en cuestión se llama Mei. Tiene 13 años y está empezando a separarse del influjo familiar, definiendo lo que va a ser su carácter. Como todas las chicas de su edad, se siente incomprendida e insatisfecha. Está disconforme con su cuerpo, insegura con sus sentimientos, piensa que no calza en ningún lado y, por eso mismo, se muestra desesperada por pertenecer. Sólo está (realmente) bien y cómoda entre su férreo grupo de amigas, con quienes comparte gustos, experiencias, miedos y ansiedades. Pero Mei, a diferencia del resto de sus compañeras, empieza a transformarse en un panda rojo gigantesco cada vez que se sobreexcita o queda dominada por cualquier emoción extrema. Algo que, para nuestra suerte, le pasa cada diez minutos.


Fusionando la dinámica del dibujo animado occidental con la estética exagerada del animé, la primera película de Pixar realizada por un equipo creativo y técnico prácticamente femenino, se agarra del humor físico y cierta ironía surrealista para explorar la incerteza universal de la adolescencia. Ambientando la trama en la Toronto de los años 2000, sin internet ni redes sociales a la mano, pero con el Tamagotchi a full y las bandas rockeras adolescentes (Backstreet Boys, NSYNC) formateando el universo simbólico de las párvulas criaturitas. Un escenario musical que Red reconstruye con devoción y respeto, gracias a las canciones que Billie Eilish y Finneas O'Connell ponen en boca del imaginario quinteto 4*Town.


Por lo que se sabe, Red tiene mucho de autobiográfico. Como Mei, Domee Shi (principal guionista y directora del film) nació en China y a los dos años se mudó a Canadá. Hija única con un padre que pasaba mucho tiempo fuera de su casa por cuestiones laborales, creció muy unida a su familia y desarrollando una relación muy especial con su madre, bastante protectora y algo autoritaria. Lo mismo que Ming, la mamá de Mei.


Y es que ahí está el centro neurálgico del film. Hasta en el desmadrado final típico de una película kaiju, la naturaleza de esa relación tan universal y tan única que se gesta entre una madre y su hija, sobrevuela y define la trama. Sobre todo, porque ambas deberán resolver la tensión que implica el empezar a dejar de ser la hija que imaginó la madre, para comenzar a convertirse la persona que elija ser esa hija. Y como el amor nunca está en dudas, queda claro que las dos sobrevivirán a esta irrepetible etapa de sus vidas. Para todos, dentro y fuera de la pantalla, arranca la era de los pandas rojos y gigantes.
Fernando Ariel García